Una de las cosas que me fue negada en la vida es el romanticismo en el sentido clásico.
Odio que me regalen flores, pues me parecen incómodas, se marchitan y es poco ecológico (aunque, honestamente, la ecología me viene en mierda); no me gusta el chocolate, me hostiga; odio, pero verdaderamente DETESTO los peluches, porque los encuentro poco prácticos, se ensucian, y están llenos de ácaros.
Montalbetti, desde que lo descubrí que me mata en verdad.
Espero que les guste.
Imágenes de separación
Tucson (sin fecha). Este desierto/ horrible se interpone
una vez más/ entre nosotros. Es malo escribir,/ saber que no nos veremos, y
hacerlo/ pasar por un poema, para que solo/ lo bello duela. Pero así es. La
guerra/ ha tomado los puentes, las salas de cine./ Mis sueños están sucios de
tu sangre./ Espero el fin del desierto, el fin/ de la guerra. Los juicios por
los crímenes./ Jamás olvides que un acto de amor/ está más allá del bien y del
mal./ Entonces te veré. Siempre tuyo, (sin firma).
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Mario Montalbetti
(Poeta Peruano)
Que barbaro Angela!!! justo que te iba a llevar chocolates jejeje.
ResponderEliminarMuy buena entrada... y a pesar que no soy tampoco para nada romantico, adoro al chocolate en especial si es amargo jejejeje.
Un ciberabrazo de luz