por Angela Barraza Risso
Lo cierto es que el mundo se arma de lazos, de contactos y de ser care raja! Cuando me tocó entrevistar a la Vane Miller le pedí que me ayudara con contactos para entrevistar más gente y se paleteó heavy. Entre esos contactos, apareció el nombre de Nicolás Copano y, entre nombres más rimbombantes, de actores, modelos y farándula, la verdad es que me llamó mucho la atención la idea de poder entrevistar al Nico. Por cierto que les he escrito a otros, sin embargo, esta entrevista me emocionaba particularmente. ¿Por qué? porque es joven, inteligente, trabaja con nuevos formatos y además, desde que lo vi en la televisión me agradó.
Pedí opiniones, y no me sirvieron de mucha ayuda porque eran 50 y 50 respecto de lo interesante que podía llegar a ser, pero filo, tampoco me importa mucho lo que opine la gente y quizás eso sea malo. Lo cierto es que al escribirle me respondió re tela y luego de ponernos de acuerdo, fijamos fecha y hora. Nos juntamos en Providencia, afuera de su productora y, como afortunadamente me hizo esperar, me premió invitándome a almorzar la güeá que quisiera. ¡La zorra! pensé, estaba cagada de hambre porque igual era tarde. Elegí comida peruana y tuvimos un almuerzo más interesante que la chucha, porque no me equivoqué. El gueón es seco. Acá les dejo la entrevista con sabor a ceviche y a Inca cola.
Cuando tenías 20 años (en el 2007), el diario El Mercurio te apuntó como joven líder nacional. ¿A qué crees que se debió eso, vos lo buscaste? y ¿qué se hace con eso?
Es una etiqueta igual. Lo han comenzado a destacar más en los últimos años.
Yo hice un análisis con lo que he hecho con mi carrera y la verdad es que me hice un poco la fama de “paria televisiva”. Siempre fui un tipo que tomó amplios caminos en lo que hacía.
Tuve la ventaja de entrar a los medios a los 16 años. Era un chico (y creo que lo sigo siendo) de clase media, que soñaba con hacer cosas importantes, como por ejemplo escribir. Aprendí a leer desde muy chico, a mi mamá siempre le llamó la atención de que tomaba el diario desde muy pendejo y lo leía.
Siempre me interesaron los temas políticos, mi papá fue dirigente de las juventudes de la democracia cristiana en el tiempo de la dictadura, pero después se fue. Entonces, mi papá siempre fue un tipo al que yo veía leer, conversar y discutir. Por otra parte, mi mamá tiene toda un alma sensible, artística; distinta. Diseña y decora, entonces yo creo que de todas esas actitudes nazco yo y me influyen mucho en todo lo que terminé siendo y haciendo.
Probablemente lo que fue la política para mi papá son los medios para mí.
La escena era distinta. Son otras perspectivas, otros los desafíos. Y bueno, ahí estoy yo y comencé a los 16. Y comencé a los 16 porque yo igual escribía en el colegio, donde eran unos hijos de puta. Igual yo trataba de hacer revistas, como el boletín del curso y mis profesores me lo prohibían. Yo era demasiado inquieto y es súper complejo para ellos manejar a un tipo con más inquietudes que los otros y sin control.
Los colegios siempre van a ser una basura y creo que los profesores son grandes culpables del drama psicológico que tiene la gente como yo, ya que tienes que pedir permiso y es lo que le envidiamos tanto a los cuicos ¿no? Los cuicos no piden permiso para nada, para bien o para mal. Me parece que para bien está bueno -se ríe- y para mal, terminan destruyendo nuestros recursos naturales y un millón de cosas más, pero lo hacen ¿no? y uno tiene un cierto cargo de conciencia moral, de como enfrenta (la clase media) las cosas.
La clase media de los noventa, entendámosla como la que había logrado la primera casa, tener un auto, ir de vacaciones a Mendoza lo cual era muy raro ¿cachay?, porque la clase media alta, fue de vacaciones a Miami. Me doy cuenta de que era de la clase media porque viajé por primera vez en avión a los 18 años, y con eso se te abre otro mundo.
Y, empecé a escribir, y a los veinte entré a VIA X. Y en esa Nota, en donde yo hablo, creo que lo más rescatable y que por eso se recoge, es que digo que quiero tener mi propia productora y trabajar mucho con internet. Dos cosas que, seis años más tarde, me tienen haciendo dinero y generando una compañía. Ahora, no sé si lo conseguí totalmente, creo que es un camino conseguirlo realmente, lo veo en mi cabeza de otra manera. Uno está encaminado, pero no sabe lo que va a pasar mañana.
¿Pero intencionaste el configurarte a vos mismo como un líder, buscaste eso de alguna manera?
Es que yo creo que a pesar de lo que te decía, de que era un poco paria, de que he hecho cosas que le han inquietado a mi público…
¿Cómo qué, por ejemplo?
No sé, poh. Lo que pasa es que, explicarle a la gente que tú haces cosas porque tienes que hacerlas, es súper difícil. Por ejemplo, yo hago un programa de noticias en CNN. Y a la gente le gusta, porque es bastante libre, decimos más cosas que el promedio, pero ¿cómo yo le explico, a ese tipo que está en su casa, que tengo que pagar todos los meses 10 sueldos? Y que por eso tengo que hacer una mención de una universidad privada, después de que hace algunos minutos estaba diciendo tal o cual cosa. ¿Cómo se lo explico? ¿Cómo le digo, mira, yo no lo hago por mí, a menos, claro, de que me quieras depositar el programa?
Yo no tengo ningún problema en que el público me financie los programas, porque yo no le voy a pedir al Estado. Nunca lo hice. Soy medio enemigo de eso, creo que el estado debiera financiar otras cosas. Y ahí viene el: bueno, pero vos trabajay para grandes corporaciones. Pero es mi camino y yo siempre tuve mi discurso. Ahora, siempre las grandes corporaciones son más respetuosas, extrañamente, que el estado respecto a la discusión rupturista.
Entonces, a mí me pasó que esas cosas, como ser joven líder, o ser citado en revistas como CAPITAL, me sirven, porque finalmente validan mi camino y son legítimas para mis aspiraciones, que son mucho más grandes que yo. Es difícil igual, no creas que es fácil. Trato de ser consecuente con eso. O sea, yo me defino como un liberal de izquierda. Sí, efectivamente creo que uno puede tener libre competencia, etc.
Yo viví muchos años en La Florida y vuelvo cada cierto tiempo. Tomo un taxi y vuelvo. Igual La Florida es una locura, es un lugar con 3 mall. Per cápita, ¡imagínate! y también eso es lo que se nos ha enseñado como público, ¿cachay? Ese es nuestro espacio público, el mall. Es nuestra vida nomás. Ahora, igual uno puede decir: ¡Es asqueroso! pero ES.
O sea, uno puede vivir quejándose, puede vivir pensando en cómo lo solucionamos, que es haciendo crecer al estado, como debe ser, y hay gente que toma el discurso como para poder tranquilizarse, en vez de tomar acción. Creo que es, como lo que yo siempre digo, sobre los medios de comunicación en general. Yo digo que, cada vez que uno ve algo, está construyendo realidad. Y si no te gusta, ¡no lo veas!
Los medios oficiales de comunicación, fomentan el periodismo ciudadano, sin embargo, el aparecimiento público de esas noticias parece estar súper controlado. ¿Qué opinas vos de eso?
Mira, el sábado pasado, en Visión 7, en el noticiero de la televisión pública argentina, que tienen el “Visión 7 Internacional”, que es muy bueno, mostraron ésta noticia: El jueves, en Temuco, se efectuará la reunión de la primera cumbre indígena. Y dedicaron 12 minutos al tema del conflicto indígena en un noticiario para explicarlo en Buenos Aires, Argentina. En la televisión pública, que marca nada en comparación a otros canales, pero estaba. Yo no tenía idea de que iba a haber una cumbre indígena.
A lo que voy es lo siguiente, hace unos años, era imposible que yo hubiese recibido la televisión argentina en mi computador, en mi celular o en mi televisor. El problema es la definición de lo que son los medios oficiales de comunicación: ¿Qué son los medios oficiales? ¿Los medios grandes? ¿Los que podemos encontrar en todos nuestros kioskos? Sí. ¿Los que están en todos los accesos de la televisión pública? ¿Los que están en la vía pública? Sí. Pero hay un problema con eso y es que antes, eso era lo único que podíamos ver, pero eso ya se terminó. Entonces, pedirle a los medios oficiales, que hagan lo que nunca hicieron, es un debate perdido. Creo que nosotros debemos crear la alternativa. Pero ¿Cuál es el problema? Que este país tiene demasiada gente joven obsesionada con el Mercurio, con hacer el Mercurio. ¡El Mercurio es muy aburrido! te lo digo yo ¡¡QUE TRABAJÉ EN EL MERCURIO!! Y que colaboro de vez en cuando. Hay un montón de gente que dice: “por qué no aparece un diario…” Y es que no hay que hacer ESE diario, porque nadie lo vendería.
Ojo, yo no sé si vos has ido a la Biblioteca Nacional en alguna oportunidad. Clarín. Clarín ERA SUPER LUN!!! Era Las Ultimas Noticias, pero de izquierda. O sea! Los titulares eran super LUN, LUN es el mejor heredero de Clarín. Pero es que el tema son las formas y qué querís decir y qué querís hacer.
Yo creo que en este país hay un problema con los ricos y con los pobres. A mí me carga el conflicto tipo Malcom X y la discriminación. Mira, el rollo Malcom X me enferma, creo que es patético. Siempre he sido bien crítico de ese discurso, en los programas de humor de “hay, los cuicos…” ¡Está bien, está bien! son una mierda, pero los pobres tampoco son un gran público.
Permítanme decirles algo: no por ser cuico vas a tener buenas ideas y por ser pobre tampoco las vas a tener. Son otras cualidades, otras sensibilidades. Entonces, a lo que voy es a que tampoco el público es bueno, no es perceptivo, porque es tonto, flojo, cómodo y es racista con él mismo. Yo vengo del paradero 23 de La Florida y ¿de donde recibo más puteadas cuando hago análisis?, ¡de La Florida! y ¿quiénes son los que mejor me tratan, cuál es el público objetivo de mis programas? Aunque no lo creas, la mayor cantidad del público que me ve, son ABC1, C2. Y yo soy un gueón que viene del C3. O sea, la pregunta es ¿qué podemos hacer? ¿Y sabís por qué les molesta? Porque hablo mejor, porque modulo mejor, porque leo, les insulta, porque esa gente ¡no se quiere!
La tele está llena de animalitos que sólo viven de sus emociones y nunca analizan. En la tele hay que llorar y ser emocional. Eso le molesta a mucha gente de mí. Que yo nunca me emociono y siempre mantengo un tono. Y está bien también. Ahora, el que quiere, me ve y el que no, me cambia.
¿Qué te pasa a vos con esto de ser una figura televisiva y tener tanto arrastre en las redes sociales? ¿Cómo se vive en lo cotidiano? ¿Sientes que hay una responsabilidad detrás?
¿Qué te pasa a vos con esto de ser una figura televisiva y tener tanto arrastre en las redes sociales? ¿Cómo se vive en lo cotidiano? ¿Sientes que hay una responsabilidad detrás?
Si poh, existe una responsabilidad.
Tenís que ser súper… a ver. Hay gente que ya pasó al nivel de temerme. ¿Cuándo uno lo cacha? es súper simple. Cuando vos sentís expresiones de odio de tipos que tú sentís que son más inteligentes que los otros. Cuando un gueón inteligente te odia, te teme. Inmediatamente. Porque temer no es una cosa inteligente. El odio, aunque se da en un plano de mayor visceralidad es más inteligente porque te deja dentro de un plano de superioridad. Temer, te baja.
Sé que hay gente que está constantemente pendiente y analizando mis discursos. Viendo qué estoy pensando, que estoy poniendo ahí -apunta el celu- o en la tele, etc. ¡Y es insoportable! porque a mí también me encantaría poner: ¡esta güeá es UNA MIEERRRRDA!!! Y uno tiene que pensar muchas veces en sí mismo o en los demás. Incluso en esa porquería. Por ejemplo: se acaba un programa de televisión que me parece una basura. Todo bien, es una basura, pero hay un montón de familias que se quedan sin comer.
Pero tampoco esa es la única forma de generar ingresos para una familia, un programa que es una mierda. O sea, lo podís llevar a otros planos también.
No sé si en un país en donde hay tan poca comprensión lectora, haya otra posibilidad. Yo cada día más, le digo a mí equipo sobre la televisión, a razón de lo que nosotros hacemos, les digo: miren ¿qué tienen en común el fútbol y el golf? ¡Muchas cosas! hay un campo verde, jugadores, se juega con pelotas, hay que meter la pelota en un espacio X. ¡Es lo mismo! En cuanto más extrema que se vuelve la televisión, y su contenido se vuelve más pelotudo, nosotros ¡más hacemos golf! Que es lo mismo, pero es distinto y jugamos dentro de esas canchas. Entonces, lo insoportable es que la gente quiere meterte a la cancha de futbol.
Hay gente que está obsesionada con decirme “hay, pero tú marcay menos que…” y es que en esta güeá yo no juego futbol. Yo juego golf.
Pero, ¡como sus visiones son simples! A veces, me pone mal que el programa sea tan público en Youtube. Por ejemplo en Twitter los comentarios son súper positivos, pero en Youtube te encontray con los fans de Franco Parisi ¿cachay? y te dicen: “Oye guatón conchetumadre, vos erís un vendío” Es decir, son la conspiración reaccionaria, entonces tú decís, pucha, me gustaría que me escuche toda la gente posible, pero ¿está realmente bien que me escuche toda la gente posible?
Cómo te construyes vos, Nico Copano, como personaje. Porque pareciera ser que siempre tienes el target super claro, por ejemplo, el del público de tu programa Demasiado Tarde
Mira, yo lo hablaba el otro día con mi terapeuta.
Empecé la terapia porque quería superar cierta dificultad en mí para percibir lo real de lo que es ruido. Para mí lo real y lo que te dicen en una conversación era lo mismo. O sea, un problema. Para mí era importante la opinión de un X y la ponía a la misma altura de lo que opinaban mi madre, mis amigos, etc. Tenía una incapacidad de generar verticalidad. Y no puede ser. Porque un tipo puede ir y descalificar de una forma muy barata, muy desde él mismo y de su propio ego, lo que yo estoy haciendo. Entonces uno no puede hacer feliz a todos. Por lo demás yo trabajo con algo que es un arma de doble filo, que forma respeto, cariño y opinión. Y un día vos podís estar de acuerdo con mi opinión y otro día no. Recuerda que la opinión genera un 50 y 50. Entonces tuve que comenzar a ir a terapia.
Y, por lo demás, la sensibilidad en mí, no es algo que yo esconda, sino que me sirve mucho. Porque la sensibilidad me conecta con algo que es lo que yo creo que me hace encantador con cierta clase de personas que me importa, como mis amigos. Que es gente que uno tiene que tener también. Uno no puede ser una suerte de policía, de autómata, y en mí el encanto se da mucho más en la sensibilidad que en otras cosas.
La gente cree que soy un gueón que se ve un poco infalible en cierto sentido.
Mira, es que yo no puedo aparecer curao, como Martín Cárcamo, porque he ido transformándome con los años y con ciertas consecuencias, más allá de haber estado en programas de mierda (como Alfombra Roja y REC). Digo programas de mierda en la perspectiva de un público y no de lo que yo piense. El público puede decir “ah, estabay en un programa de mierda, pero ahora estay en una güeá mejor, o al revés”. Hay público que dice: puta, eray mejor cuando estabay en una güeá más popular como la del COPANO cachay pero siempre me constituí como una voz moral. Como un sujeto que es capaz de decir que hay programas juveniles que son una estupidez, el mismo que puede decir que ustedes en la concertación no han aprendido una mierda. Un tipo capaz de decirle a un gueón de derecha como Moreira en el mismo estudio: Fuiste a China? –sí, fui a China- Y te gustó China? –sí, me gustó China y los chinos son más capitalistas que nosotros- y sí, y también violan derechos humanos igual que ustedes! fue chistoso y Moreira se cagó de la risa y me dije “GOL”! Entonces es complicado, es muy complicado.
Pones a comparar tu talento con el de los demás y de repente te day cuenta de que ¡chucha, si me pusieras a jugar en la cancha de los demás uno sería muy bueno! Si yo me pusiera a hacer un programa pelotudísimo, sería excelente siempre. ¡Animando, no bailando! jajajaja.
Pero estoy en otra cancha que también tiene sus cosas. Me invitan a viajar, me leen, estoy escribiendo un ensayo, me invitan a hacer clases, tengo una linda mujer, buenos amigos, mi hermano está bien, mis papás también, me quieren los que me tienen que querer, entonces tiene cosas maravillosas. Pero tiene llamados a superarse también y creo que soy lo suficientemente joven como para superarme a mí mismo. Yo creo que a los 35 voy a dejar de serlo, y me quedan 10 años. A los 35 voy a querer estar tranquilo en algo. Espero estar más concentrado en mis hijos.
¿Quieres tener hijos?
La verdad sí, y quiero estar más concentrado en ellos que en mí y en esta güeá. Espero haber logrado, haber hecho tantas cosas para poder concentrarme en eso. En hacer una familia, en tener una descendencia. Una de las cosas por las cuales hago teatro es un poco por eso, para estar bien cuando vengan mis hijos, pa cuando sea viejo. Quiero tener plata y no tener fama, porque la fama es eso, una tema de turnos, tú le entregay la fama a otros. El que quiera establecerse como famoso para siempre es un egoísta, un egoísta porque va a tener que transar siempre. Y uno debiera dejar de transar y decir chao, chao amigos, así debiera ser siempre.
Debería haber un momento así. En el que yo pueda optar a eso, porque mi padre también lo hizo. En ese sentido, como que uno hereda las cosas. Es inevitable que uno sea sus padres un poco. Más allá de que lo odie o no lo odie, más allá de que haya cosas que no me gusten. Pero uno igual lo termina siendo. Nos persiguen los fantasmas, nos persigue el pasado que se vuelve futuro. Es la única güeá que uno tiene como clara. Que eso va a suceder.
Oye Nico, ¿crees vos que los nuevos medios fomentan la lectura? Y ¿cómo crees que han sido las políticas educacionales al respecto?
A ver, yo creo que una de las güeás que a mí me salvó, fue leer. Siempre.
Yo siempre fui un lector. Pa mí, a los 15 años, el libro más importante que me leí fue el “No Logo” de Naomi Klein. Lo encargué a Mendoza, porque, cuando yo tenía 13 años, comenzó a aparecer la revista Rolling Stone argentina, que era una de las primeras revistas como Caras o Cosas, pero era larga y tenía hojas y hojas que hablaban de cosas como Internet, hackers y drogas. Pa mí fue toda una apertura mental la Rolling Stone. Y venía con uno o dos meses de atraso y fue el momento previo a internet y, paralelamente, aparece internet y con eso comienzo a leer lo que a mí me gusta.
Me acuerdo que la primera vez que interactúo con Villouta, que es mi mentor en tele, el primer diálogo que tuvimos fue: ¿Te leíste el No Logo? –No- Toma, ¡lo tengo!, (se lo presté) y fue un ¡Oh gueón! y rallamos. Y somos amigos hasta hoy. Leer es compartir.
Hasta el día de hoy leo todos los días. Tengo configurado acá en el computador (apunta el celular) y leo todos los días. Me suscribí a New York Times, ¿cachay? leo. Pa mí, todavía es importante. Ahora estaba leyendo LUN. A mí siempre me emociona leer, me emociona buscar las historias, los backstage y creo que es súper importante y es importante también fomentar eso.
Pa mi leer no es pasar una letra tras otra y después repetirla en tu cabeza. No.
Leer es LEER, leer entre líneas a ver qué te están diciendo.
Yo me siento parte de una generación, y creo que tú también, de una generación que vio algo histórico, o sea, la apertura de internet es equivalente a haber visto el momento en que Gutenberg crea la imprenta. Es algo que mi hermana chica no vio. Por ejemplo, tu hijo de 5 y tu hijo de 6, nunca vieron un teléfono con cable. Si tú les mostray un teléfono de esos con disco se van a la mierda ¿cachay? onda: ¡mamá qué es esto! Si ven un fax…
¿Viste? Ahora, ¿qué trajo internet? Internet trajo dos revoluciones: La primera revolución es que, por primera vez, no tenemos que movernos para ver algo o para saber de algo. Yo en la mañana, cuando es invierno, leo los titulares en mi cama y dejo la ducha encendida para que se humedezca el baño antes de entrar, leo los feeds, cosa que el baño esté bien calientito y me desplazo nada más de un punto a otro. Pero antes, yo hubiera tenido que ir al kiosko o a abrir la puerta si es que estaba suscrito y ¡A UN DIARIO, que es nada!
A mí a veces me da pena la idea de morir, solamente porque pienso que me voy a perder de todo lo que hay y ¡la güeá está más entretenida que nunca! Yo soy adicto a Wikipedia. A veces me encuentro a las 7 u 8 en la oficina y comienzo a buscar marcas. Veo la tele, encuentro tal güeá y dice algo y comienzo a buscar, a buscar y ¡te encontray con un montón de cosas que ni siquiera sabíay! Entonces, la preguntas es: ¿qué es leer hoy?
Uno de los capítulos de mi libro se llama QUÉ FUE LA TELEVISIÓN. Estoy escribiendo un libro de ensayos para Planeta y sale ahora en marzo. Y me pregunto qué fue la televisión. Ahora yo me pregunto, ¿qué fue leer? Porque, además de que internet trae el tema de poder instalarse en un lugar del espacio a recibir la información de otros lugares del espacio físico, la gracia que tiene internet, es que te presenta la información de la manera más amigable posible y en muchos formatos, ¿me entiendes? Primero las lecturas, las letras, entre ellas los links, que se van transformando en imágenes y las imágenes que se van transformando a su vez en video y los videos en texto y la indexación de todo ¿cachay? ¡de todo!
Cuando pasa eso, el cerebro muta. Dicen que lo que hizo que nos transformáramos en Homo Sapiens fue el que el ser humano aprendió a calentar la comida. Cuando calienta el ser humano la comida, aparecen nuevos nutrientes, aparecen nuevas mezclas y nuevos elementos, lo que se traduce en evolucionar. Esa es una de las teorías de la evolución respecto de la tecnología. La tecnología para calentar, que en verdad no es una tecnología, sino que termina siendo una fórmula o una técnica. Entonces, ¿cómo no va a ser aplicable a esto? Nuestras cabezas, nuestras formas de ver evolucionar.
Yo veo tele y me aburro, porque tengo que cambiar lo que estoy viendo cada tres minutos porque ¡conchesumadre, es FOME! si no me están contando una buena historia, claro. Si hay una buena historia sí, pero si la historia no es tan buena, salto, salto, salto, salto.
Tenemos que ser capaces de leer nuestro tiempo. En nuestro tiempo, quizás, la lectura sea de otra manera. Y no es menos lectura porque esté en otro formato.
¿Cómo ves tú que las redes sociales afectan a los gobiernos y cómo crees tú que ha sido el desempeño, en particular, de este gobierno, considerando que Piñera es el presidente más ridículo de Latinoamérica?
Sí, a ver, yo tengo varias perspectivas. En primer lugar, la democracia tiene un problema, que es que Twitter es más rápido. los políticos tienen un problema y es que internet es más rápida que ellos, las inquietudes son más rápidas. Vivimos en una época de gobiernos Trending Tópic, que es peligrosa también. Porque las políticas públicas necesitan tiempo.
No tengo dudas de que hay un humor generacional transversal de alta velocidad y que Piñera es una víctima directa de eso. Si tú ves, Piñera fue hace poco a Perú, que debe estar en lo que pa nosotros fueron los noventa y ¡lo amaron! porque se parecen a ese modelo de país que se formó en los noventa, ¿cachay? A lo que voy es que el problema es la gente.
Porque lo bueno que tiene la tecnología es que informa, pero también, a la vez, te desinforma si tú no sabes leer. Saber leer ya no es saber juntar letras. Saber leer es descubrir qué es lo que te quieren decir.
¿De todos los medios en los que has trabajado, con cuál te quedas y por qué?
Internet, que los mezcla a todos.
De los analógicos, me quedo con la radio. Porque hacer cambios en la tele me ha costado menos que hacer cambios en la radio. La radio es más conservadora y ahí yo siento que tengo un partido pendiente. En algún momento tengo que lograr, en alguna posición, crear algo raro ahí. Porque la radio te permite hacer una güeá de velocidades muy divertida, con mucha gente al mismo tiempo. Tú puedes hablar con quince personas al mismo tiempo y va a ser muy gracioso siempre. Me encanta esa velocidad.
¿Vos trabajas en medios, que son, en cierta medida, los modeladores de la idiosincrasia de un pueblo, sientes vos que esos valores están incorporados en la gente?
¿No será al revés?
Mira, hace poco, vimos con mi novia el capítulo 1 de Protagonistas de la Fama, que lo subieron a youtube. Y en ese primer capítulo, tú ves que todo se trata de tener una misión. Cuando Sergio Lagos entra a la casa estudio, lo acompaña Liliana Ross, que ya se te debe haber borrado de la memoria, y es una actriz de primer nivel. Y entran a la casa con una figura del teatro. Luego, siempre se habla del “sueño”. Las tipas que entran, explican que quieren ser divas. ¿A qué voy con esto? A que hoy los programas no son de sueños; han pasado 10 años y la televisión hoy, se parece más a la gente que hace 10 años.
Primero, se quitó esa barrera de que para entrar a la televisión, había que estudiar. O que tenías que ser cantante, artista o, por último, tenías que ser una varieté elegante. Hoy la televisión se parece mucho más a la gente, con todo lo bueno y todo lo malo que eso conlleva.
Y ¿sabís por qué? Porque hoy los medios buscan, más que nunca, apelar a grupos grandes y a emociones colectivas. No hay nada racional en la televisión. Es pura emoción.
Internet no. Internet es más racional, porque es todo. Pero la televisión es pura emoción, porque se achica cada vez más su torta, en porcentaje es menor los que la ven, ha perdido relevancia. Televidentes no sé, pero relevancia sí.
Se transformó en un elemento. Te doy un ejemplo, ¿el secador de pelo ¿cuántas veces lo usay? una vez al día, y la televisión la vamos a ver una vez al día. En la noche. Cuando haya un evento. Va a ser una herramienta de cuando haya un momento. Antes no era así.
Estamos viviendo una nueva época y, obviamente, uno parte siendo pobre en una nueva época. Mira, yo tengo una productora, pero no es una productora. Ahora vamos a firmar un contrato con youtube para hacer emisiones de youtube live. Lo que hacemos en el estudio, lo vamos a llevar al espacio, a la estratósfera y esta tecnología, me va a permitir a mí transmitir en vivo, hacer shows, armar un canal de televisión y ahora la idea es hacer un canal que se llama MQLT, “Mejor que la Televisión” y este es el slogan, que es brillante: Televisión gratuita y de calidad para todos que te remonta a “educación gratuita y de calidad para todos” y es un tema que, básicamente es: Demasiado Tarde, otro programa, que es muy divertido, porque será de comedia y manualidades; un programa de música; un programa de causas, que se llama la causa del día y todo esto en HD y ahí vas a poder ver espectáculos en vivo, shows y todo lo demás. Entonces estamos en esa y es porque la televisión mutó.
Ahora, siempre está el tema; mi equipo siempre me dice: tú podrías volver a la televisión común y corriente y yo les digo, pero no va a ser mí televisión ¿cachay?
Mi aspiración es otra, mi aspiración es ser el dueño de lo que yo quiera hacer y ahí tengo que ser súper respetuoso y trabajar con los míos. Y es un camino muy largo, es más sufrido, eso es lo más malo. Yo tengo otras oportunidades. La oportunidad de ser el dueño y es una oportunidad que tiene otras características, mejores, peores, no sé.
Y todas estas cosas te internan en un escenario completamente nuevo, donde finalmente uno puede aportar más visiones ¿cachay? Mi objetivo fue hacer Demasiado Tarde este año e hice demasiado tarde y me fue la raja, y fue un éxito porque es respetado. Todos los gueones del medio dijeron: ¡conchesumadre, este gueón hizo algo respetable! ¡O sea! yo hice el debate de la FECH en la tele, y no lo hice de aburrido. Los cabros fueron, nos reímos y ¡funcionó!
Demasiado tarde partía de dos bases, y siempre las desarrollábamos y las discutíamos mucho con mi editor. Primero, que nuestro público no ve noticiarios, entonces nosotros teníamos que partir reseteando la noticia.
Si tú ves todas mis entrevistas, yo hago de bobo ahí. Yo sé el tema, pero me hago el gueón. Por ejemplo, invito a un premio nacional de economía y le pregunto de qué se trata el tema de la burbuja inmobiliaria. Entonces él responde. Después yo le digo: ya, pero ¿cómo es eso? y luego remato con un chiste. Hay una fórmula ahí ¿cachay? pa que la gente entienda.
¡El periodismo suele ser una güeá asquerosa! El periodismo joven como el tipo de Pantalla Abierta, ¿no? porque su modus operandi es “¡somos inteligentes!” Y ¡Hey! ¡No somos inteligentes!, salimos en televisión, pero no somos inteligentes ¡por eso! Si fuéramos realmente inteligentes, estaríamos todos sacando doctorados ¿cachay? Entonces ese es el rollo y creo que logramos fracturar el modelo. Está eso y está el “Son todos el enemigo” que es algo muy adolescente, pero que nos permite equilibrar y cuando hay algo que nos molesta, pues lo decimos.
Me acuerdo con lo de Luchsinger. No puede ser que, aunque uno no esté de acuerdo con lo uno o lo otro, vayan y quemen a alguien. Pero la violencia canjea violencia. Y Nadie habla de lo que pasó antes. Esto no empezó el mes pasado o antepasado cuando van y queman a una pareja, que es lo que los medios intentan instalarnos. Porque los medios, que nunca han hablado una mierda del tema, comenzaron a enviar gente pal sur, a partir de esto.
Y bueno, igual es sospechoso eso de que se hable a partir de un determinado momento de “ciertas noticias”. La televisión hoy en día, me deja una sensación de que me están metiendo el pico en el ojo, de que, al igual que en la peli V from vendetta, nos están mintiendo siempre.
¿Te digo una cosa sobre la sospecha? La sospecha es un enemigo de la racionalidad. Yo siempre he pensado que no hay tal plan maestro de cagada. Lo que pasa uno, en realidad no sabe si es porque son tontos o porque son malos, los que hacen los noticieros, pero yo creo que es porque son muy tontos. Pero no es de maldad. No hay cuatro tipos juntándose en la Dehesa a tomar té, diciendo Ñaca Ñaca y sale un rayo.
¿Estay seguro?
No existe. Todo es más clasista, más racista, más básico. No son tan inteligentes. Porque si hubiesen sido tan inteligentes, el gobierno de la derecha hubiera resultado. Económicamente no anda mal, pero si hubiesen sido realmente inteligentes a nivel de comunicaciones, chuta, tenían todos los medios. Tenían todo a favor.
No existe. Todo es más clasista, más racista, más básico. No son tan inteligentes. Porque si hubiesen sido tan inteligentes, el gobierno de la derecha hubiera resultado. Económicamente no anda mal, pero si hubiesen sido realmente inteligentes a nivel de comunicaciones, chuta, tenían todos los medios. Tenían todo a favor.
No hay alguien malo planeando cagarnos. Lo que hay es ignorancia sobre las herramientas. Y eso si me parece más Jaime Guzmanesco. Eso sí me parece más satánico. No como Hinzpeter, que es más caricaturesco. Si en la entrevista que le hizo Fuguet en QUÉ PASA, revela a Hinzpeter. ¡Solo quieren amor! Ahí dice: Ellos nos han ignorado, nos han vuelto unos insensibles y nosotros haremos que las cosas como Inti Illimani, sean para todos y no sólo de la izquierda. Es un Quiero que me quieran.
Siguiendo con la idea de las herramientas, mira, vos tienes hijos, y si tus hijos no te ven todo el día pegada al celular gueviando, que es lo que a mí me preocupa, si te ven leyendo, necesariamente van a buscar cosas que leer. Pero si ellos no saben que existe la lectura, que existen las bibliotecas, que existen las ferias del libro, que no pueden hojear los libros, que no pueden tocarlos, si uno no sabe que existe esa posibilidad, se queda ahí. Eso es lo bueno y lo mágico de creer en sí mismo y en que hay una güeá más y más grande que explorar. Por ejemplo ahora, yo ¿qué es lo que quiero hacer? quiero hacer güeás pal extranjero. Porque si trabajo acá, voy a trabajar pa un grupo pequeño, pero si trabajo pal extranjero, voy a trabajar para muchos grupos pequeños del mundo y eso, es otra medida mental y si yo no hubiese leído en internet que existe una güeá como la BBC y como la venta de formatos, etc, si yo no hubiese leído todas esas cosas, el tipo que es mi representando en las negociaciones en el extranjero, porque lo estamos logrando, yo no lo hubiera podido sorprender por vía streaming. Entonces el tipo piensa, un gueón, que vive acá, un pendejo, que cacha el mercado de Cannes, chucha, tengo que tenerlo a mi lado, tengo que saber qué está haciendo ¿cachay? Pero finalmente todo es más lento.
Pero gueón, a penas tenís 26, qué tan lento? qué más querís?
El mundo. (se ríe)
fotos: Angela Barraza Risso en la calle, y la última en manos de un señor de la productora de quien averiguaremos el nombre.
No hay comentarios