Hace días que no escribo nada en fcbk. Hace tiempo también que no escribía en el blog.
Tampoco ahora pienso extenderme mucho.
Está rara la vida. Complicada, como el clima.
Estoy aprovechando de escribir. Tengo 3 libros parados y comencé 2 más. Uno ya está terminado. El otro ya casi y estoy tratando de ver qué hacer con ellos.
Pero a pesar de la desolación, y con esto me refiero a mi estado anímico, no en el sentido de pesar, sino de desierto en el que me encuentro, así como en la ilustración de arriba, que, por cierto, no sé de quién chucha es, así que no puedo dar los créditos aunque quisiera porque está re buena, el asunto es que sigo pensando que no todo lo que hemos hecho está tan equivocado.
Mi hijo menor estuvo de cumple anteayer y fue el cumpleaños más lindo del mundo. Pidió nada más chaparritas de almuerzo, con jugo. Y como quería regalos, con nuestro hijo mayor tomamos una revista vieja de tv cable y encontramos imágenes de unos monos que le gustan. Las recortamos y le hicimos un collage en un cuadro viejo que teníamos. Le pusimos cola y pegamos los monos. Vicente, nuestro hijo mayor se encargó de la composición. Yo, por mi parte, le forré un tarro de café con papel de regalo y le puse barquitos. Sellé la tapa y le abrí un agujero para que pudiera meter monedas pues quería una alcancía, y terminamos entre todos, con el papel que quedó, haciéndole una corona. Lo declaramos el rey del cumpleaños. Y fue tan feliz!! Pasamos la tarde juntos y después se fueron a ver monos.
El costo del cumpleaños nos salió por el valor del queso para las chaparritas.
No podemos estar tan equivocados.
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